Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC SEVILLA 07-01-1930 página 25
ABC SEVILLA 07-01-1930 página 25
Ir a detalle de periódico

ABC SEVILLA 07-01-1930 página 25

  • EdiciónABC, SEVILLA
  • Página25
Más información

Descripción

A B C. M A R T E S 7 DE E N E R O D E 1930. EDICIÓN D E ANDALUCÍA. P A G 2 INFORMACIONES Y NOTICIAS Fútbol. Campeonato de Liga. E l Sevilla F C vence al Murcia por seis a uno. E l Real Madrid vence al Racing de Santander por seis Tantos a cero. Otros partidos. que tienen una delantera rápida y bien traSevilla F C seis tantos; Real Murcia, bada, con un García de l a Puerta en el uno centro, que es un formidable chutador, poUna victoria completa. -Lo fué la lograseen en cambio una línea media muy endeda el domingo por el Sevilla frente al gallito ble y una defensa francamente mala. de l a segunda L i g a Esto por lo menos es la expresión exacta Seis veces los campeones andaluces hiciede lo actuado el pasado domingo. ron pasar el pelotón bajo el marco murciaE l meta, pese a los seis goales que le nista, mientras que los forasteros sólo lo marcaron, j u g ó excelentemente. L a delanlograron una, al bisar un penalty. tera sevillista le tiró mucho y bien, tenienE l espíritu sevillistap decaído después del do que emplearse constantemente, por mala partido con el Iberia, ha recobrado sus bríos actuación de la pareja de retaguardia. merced al tónico suministrado por sus jugaAsí no es de extrañar que lo copioso del dores en el encuentro con los hasta el do- tanteo no esté en relación con la labor del mingo imbatidos. portero. E l resultado obtenido supone una lección Los nuestros jugaron bien, sin excepción. que no debe desaprovecharse. Eizaguirre, con perfecta colocación paro J u g ó el mismo equipo que contra el Ibe- cuanto le tiraron, que no fué mucho, pero ria, con un solo cambio en el adelante y sí con peligro siempre. otro en l a zaga. L a pareja defensiva se entendió muy bien, P o r lo que a esto último respecta, puede sobresaliendo Iglesias. decirse que la retaguardia estuvo tan bien L a línea media, estupendamente conduciservida como con Sedeño, pero no así suda por Abad, que cada día está m á s en forcedió con j a línea de ataqué al incluirse en ella a Benítez en el puesto de Campanal, pa- ma, tuvo una de sus tardes más brillantes. Rey y Arroyo, contagiados (lo bueno sando éste al centro. también se pega) del buen juego del centro De esa manera, el acoso estéril de la pa- medio realizaron verdaderas filigranas, tansada actuación se tradujo en asalto brillanto en el corte de balones como en el servirte, coronado por el laurel de l a victoria. los al adelante. Rey únicamente tuvo su Vea el Sevilla (casi todos o todos los crísempiterno defecto del empleo de brusqueticos lo han repetido una y mil veces) que dades, pero con l a disculpa de haberse enGuál y Campanal no caben en una misma tregado los forasteros a mayores excesos. delantera, puesto que siendo ambos jugadoDe la línea delantera, muy bien el trío res de las mismas cualidades se estorban en interior. Los extremos jugaron a ratos, pero el remate, haciendo infructuoso el esfuerzo todos se emplearon con. entusiasmo. para llegar frente a la meta enemiga. Con estos antecedentes, fácilmente se coForzoso es reconocer que Benítez j u g ó el lige lo que pudo suceder en el partido. U n a domingo como mandan los cánones, sabiendelantera entusiasta y bien apoyada, había do cederle a su centro cada vez que tuvo de desbordar constantemente las líneas deocasión, y tirando cuando lo requería así la fensivas contrarias, ño muy bien ligadas. colocación, y eso no lo hubiese hecho j a m á s E n cambio el adelante enemigo, aunque se Campanal con Gual en su puesto. entendieran bien, como se entendió, habría Sacamos, por tanto, en consecuencia, que de estrellarse ante una línea media que corla completa victoria fué obra de haber alitaba mucho y una defensa que actuaba con neado el Sevilla un equipo con cabeza. la seguridad que lo hizo la sevillista. E n qué poco estriba la consecución del Sólo, por tanto, los delanteros murcianos triunfo! llegaban ante Guillermo cuando podían esEl enemigo y los de casa. -Los murciacaparse por rapidez, y eso sí, cada vez que nos forman un conjunto desigual. Mientras lo lograban, creaban una situación peligrosa, que Eizaguirre se encargaba de desi pejar. Durante los noventa minutos el dominio seviilista fué realmente aplastante, con escapadas sueltas de los murcianos, cuya delantera ligaba bien, habiendo de verse fracasada, sin embargo, por falta de apoyo atrás. García de l a Puerta, aunque no marcase, se reveló como excelente, chutador, pese a que por nerviosismo perdiera dos ocasiones en el primer tiempo. Tiene él para nosotros imperdonable defecto de recurrir al juego sucio con demasiada frecuencia. E l extremo izquierda Sanz es otro elemento imponderable del Real Murcia. Centra estupendamente y se interna con facilidad cuando la jugada lo requiere. Los otros tres delanteros, ya lo hemos repetido, a tono con estos dos destacados. Sería ocioso, después de lo dicho, haeer minuciosa y soporífera relación de! partido, jugada por jugada. Diremos cómo fueron los tantos. ¡Vaya regalo de Reyes que nos han deíao los sevillanos! Los goales, cronómetro en mano. -PriEsto no es poner las botas, esto es Donermer tiempo. Dos minutos. Roldan corre l a se las botas. línea y da un centro atrás, que recoge Abad. Este pasa a Carreño, desmarcadísimo, quien, sin parar, empalma fulminante a l a red. Once minutos. Iglesias, que juega muy adelantado por el dominio aplastante del Sevilla, da un pase largo a Carreño. Sale el portero a destiempo, y Carreño tira, rechazando el palo; recoge el rechace Cam- Oselito. ¡Por finóle hizo ar Sevilla una buena tarde! panal y manda el balón a las mallas tranquilamente. L a salida del meta ha sido detestable. Cuarenta y tres minutos. Abad, que está haciendo con el pelotón lo que quiere, le pone en los pies un balón a Carreño, quien larga un soberbio tiro, haciendo funcionar el marcador por tercera vez. Segundo tiempo. Diez minutos. E l goal del triple chut. Carreño pasa a Brand, quien se interna y chuta, rechazando apurado el portero. Campanal recoge el rechace y chuta nuevamente. Nuevo rechace del meta y nuevo chut de Campanal, que esta vez logra, el bien trabajado tanto. Veinticinco minutos. Abad sirve a Campanal. Este pasa de cabeza a Benítez, quien chuta sin parar, cruzadísimo. H a sido el tanto más bonito de la tarde. Treinta y tres minutos. Yi. bad pasa a Brand, quien se interna, apurando la j u gada para chutar cruzado, haciendo inútil la estirada de Vidal. Cuarenta y un minutos. Se tira un córner contra el Sevilla. E n el lío va el balón a la puerta, y Rey detiene el seguro tanto con las manos. Se tira el penalty, que da en el montante, yendo fuera. E l arbitro hace repetir el penalty, porque Eizaguirre se ha movido hacia adelante. E n e ¡bis consigue el M u r c i a su único tanto. Como se verá, l a mayoría de los goales se han originado en jugadas de Abad. Notas males. -Abad, que fué el blanco de las iras murcianistas, hubo de retirarse unos momentos en el segundo tiempo, pasando Rey a su puesto y Benítez al de Rey. E l arbitro, Sr. Melcón. que realmente estuvo discreto, se echó el público encima, por falta ele política al repetir el penalty. Antonio Olmedo. Alineación de equipos. -Real Murcia: V i d a l Castro, Escuta; Griera, Prieto, B a ñ o s julio, Morales, García de la Puerta, A r a c i l Sons. Sevilla F C Eizaguirre; Monje, Iglesias Rey, Abad, A r r o y o Roldan, Benítez, Campana Carreño, Brand. E n el E s t a d i o de l a E x p o s i c i ó n E l B u dapest y el Sevilla empataron a un tanto Ayer, en el magnífico estadio de l a E x posición, se j u g ó el anunciado partido amistoso entre el Budapest Sportgyesukt, cam w I

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.